Cabaret

Esta semana vimos en Historia una película que no me habría gustado sino fuera por el contexto histórico y el mensaje.
Esta película es Cabaret, dirigida por Bob Fosse y protagonizada por Liza Minelli (la hija de la niña prodigio de la versión original del Mago de Oz).
Fue premiada con 8 Óscars y obtuvo 10 nominaciones. Entre estos premios están el Óscar a mejor dirección (Bob Fosse), el Óscar a mejor actriz (Liza Minelli),  el Óscar a mejor actor de reparto (Joel Grey) y el Óscar a mejor banda sonora. No pudieron obtener el Óscar a mejor película del año 1972, que fue recogido por El Padrino (en mi opinión, totalmente justo). El Óscar a mejor actor se lo llevó Marlon Brandom por El Padrino ese año.
Es un musical. No como Sweeney Todd, que es casi en su totalidad cantado, o como Los Miserables, pero tiene muchos números musicales de una grandísima calidad, tanto en el ámbito coreográfico como en el musical. Muchos de ellos me encantaron (al final pondré mis favoritos).
La película trata una historia de amor entre una bailarina de cabaret (Liza Minneli) y un inglés (Michael York) en el Berlín de 1930. Para quién no lo sepa, en ese momento el nazismo estaba ganando acólitos a un ritmo escandaloso y sus acciones antisemitistas, racistas y anticomunistas empezaban a tomar forma. No voy a perder más tiempo en un resumen porque creo que lo importante no es la historia de la película, sino el contexto en el que acontece.

CONTEXTO:

La película, como ya he dicho, acontece durante el ascenso del nazismo en Alemania. El Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán (Partido Nazi) había sido fundado hace algún tiempo, después de la Primera Guerra Mundial. Había ganado acólitos gracias a la precaria situación que se vivía en Alemania por el Tratado de Versalles. Sin embargo, la intervención de los poderosos EEUU había permitido calmar la crisis y crear una situación más estable. La estabilidad siempre hace que los partidos extremistas pierdan fuerza, y en este caso no fue menos. El Partido Nazi fue perdiendo paulatinamente el poder que había ido ganando y estaba a punto de quedarse en nada.
Pero llegó el crack de la bolsa, y con él la crisis mundial de los años 30. Esta gran crisis hacía que de nuevo el Partido Nazi y el Partido Comunista ganarán fuerza. Pero había una diferencia entre ambos partidos. El Partido Nazi estaba apoyado por las clases medias y los grandes empresarios y el Partido Comunista (que buscaba la colectivización) no. Este apoyo permitió la persecución de los miembros comunistas por parte de los "camisas pardas" la Gestapo, que agredían con brutales palizas a los comunistas. La policía y el jurado siempre hacía la vista gorda. Y mientras tanto, Hitler practicaba una demagogia total sobre los ciudadanos alemanes. A cada clase le decía lo que quería oír y así fue ganando tirón. Y luego llegó el antisemitismo y en esta película se observa a la perfección este ascenso y esta ideología nazi que fomentaba las palizas, la intolerancia y la falta de libertades.
Ahora voy a poner las escenas en las que mejor observó este ascenso.

ESCENA DEL CHICO ALEMÁN:
Esta es la escena que más me impactó de toda la película. Y la verdad es que me encantó y me ayudó a comprender un poco mejor como funcionaba el nazismo (captando jóvenes y convenciéndolos de la fuerza nazi y de la raza aria para evitar que hubiera gente en contra del mismo). En esta escena, el chico representa el ideal ario y es un "camisa parda". Canta una canción alemana titulada "der morgige Tag ist mein", que sería en español "el futuro me pertenece".
Os la pongo subtitulada para que os fijéis en la letra.
Creo que representa a la perfección los planes nazis. Captación, conquista, dominio. Aquí ya se puede observar la influencia del nazismo en aquella época en la que aún había libertad de opinión. El único que no canta es viejo y parece estar a punto de morir. ¿Casualidad?
Quiero explicar la parte final de la escena. El chico inglés, Bryan, le dice al hombre rubio de bigote, Maximilian (un riquísimo empresario): "¿Aún crees que los podéis parar?". Le dice esto porque Maximilian le había comentado que los nazis hacían bien a la sociedad por el momento, al eliminar a los comunistas. Defendía que se les podría parar en el futuro.
Para mí, lo más escalofriante es la parte en la que el chico se pone la gorra y hace el saludo fascista.

ESCENA DEL CHIMPANCÉ: 
Esta escena es una de las mejores sátiras (hay más de una) de la película. Poco hay que decir, la verdad, de esta escena.
Transcurre en uno de los números del Cabaret (que se intercalan con la trama de la película) y es interpretada por el actor que más me gustó de la película, el maestro de ceremonias, Joel Grey. Me voy a parar más tarde con él. Ahora lo que hay que decir de la escena es que es un número musical cómico y que tiene una gran sátira al final. La voy a poner con subtítulos y podréis ver que la canción viene diciendo: "Si pudieran verla a través de mis ojos..." todo el rato.
Pues bien, la sátira tiene que ver con eso. Observad la escena y prestad atención a la sátira, que está en el último verso de la canción.

Esas fueron las escenas más representativas para mí. Ahora quiero hablar del maestro de ceremonias que interpreta la escena anterior, Joel Grey. Ya he dicho que es mi actor favorito de la película, con diferencia. Y es que lo hace muy bien en toda la película. El vestuario y el maquillaje están genialmente elegidos, pero el actor lo hace muy bien. Como curiosidad, este mismo actor fue el que actuó en el musical de Broadway. Los productores fueron los que lo querían en la película, y por suerte actuó. 

Para acabar, os dejo los números musicales que más me gustaron.

Money (Liza Minelli y Joel Grey):

Willkommen (Joel Grey): 

PD: para la semana si que veo "Un perro andaluz" y subo la entrada. Esta semana no tuve nada de tiempo.